No dejes que termine el día sin haber crecido un
poco, sin haber sido feliz, sin haber aumentado
tus sueños. No te dejes vencer por el desaliento.
No permitas que nadie te quite el derecho a
expresarte, que es casi un deber. No abandones
las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
No dejes de creer que las palabras y las poesías
Sí pueden cambiar el mundo. Pase lo que pase
nuestra esencia está intacta. Somos seres llenos
de pasión. La vida es desierto y oasis. Nos derriba,
nos lastima, nos enseña, nos convierte en
protagonistas de nuestra propia historia. Aunque
el viento sople en contra, la poderosa obra continúa:
Tú puedes aportar una estrofa. No dejes nunca de
soñar, porque en sueños es libre el hombre.
Walt Whitman
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Me ha encantado el texto, sí señor!
ResponderEliminarjeje
Venía a agradecerte tu visita y tus palabras en mi blog. Y ya me he quedado un ratillo a leer.
El nombre de tu blog ya me ha llamado la atención, así que... Bueno, éste y el de las mamás de tercero. :)
Besos, Estels!!
Primero de todo gracias por tu paso por mi blog y por tu comentario, eso siempre es de agradecer.
ResponderEliminarSegundo decirte que compartimos profesión a jornada completa: ser madres.
Y que tu post me ha encantado, son palabras que se deberían leer todas las mañana junto al desayuno.
Un abrazo,
Anabel, la Cuentista
Precioso y muy cierto hacer eso, sentir así. Me ha sentado muy bien leerlo, hay días que necesitas una dosis de fuerza, de impulso.
ResponderEliminarUn beso estel. tu blog cada día es más interesante.